Jorge Eduardo Eielson

Jorge Eduardo Eielson, nasceu em Lima, no Perú em 1924. Foi poeta, artista plástico, ensaísta, novelista, dramaturgo e jornalista. Pela mão de José María Arguedas, na altura seu professor, entrou cedo no meio literário e intelectual da cidade de Lima e em 1945, aos 21 anos, ganhou o Premio Nacional de Poesía.

Foi um dos impulsionadores dum movimento de renovação da poesía peruana, acompanhado por Javier Sologuren, Blanca Varela e Sebatián Salazr Bondy. A obra poética de Eielson, resulta de uma procura constante de novas formas expressivas. Nela se conjugam as influências de Eguren, Martín Adám, Westphalen e Vallejo bem como as de Rilke, Bretón, Ezra Pound e Prevert.

Publicou os seguintes livros: : Canción y muerte de Rolando (1943), Reinos (1945), Habitación en Roma (1951), Mutatis mutandis (1967), El cuerpo de Giulia-no (1971); Poesía escrita (1976), Noche oscura del cuerpo (París, 1983); Primera muerte de María (1988), Antología (1996), Sin título (2001), Ceremonias ( 2001).

Na sua expressão plástica, nota-se a influência das formas e dos mitos precolombianos, para além de Klee, Miró, Picasso., Mondrian, Torres García, Matta e Keith Haring, entre outros. Obras suas têm sido incluídas em várias exposições temporárias na Europa e na América e estão representadas nas colecções de alguns museus importantes do mundo.

Jorge Eduardo Eielson, morreu no dia 8 de Março de 2006 em Milão, cidade onde residia há 50 anos.

 

Ler mais: biografía  / literturaperuana / la arqueología celeste de jorge eduardo eielson / la escalera infinita 

Poemas

cifra sin fin cifra sin
fin cifra que nunca
principia
cantidad esplendente
cero encendido
dime tú por qué
dime dónde cuándo cómo
cuál es el hilo ciego
que se quema entre mis dedos
y por qué los cielos claros
y mis ojos cerrados
y por qué la arena toda
bajo mi calzado
y por qué entre rayos sólo
entre rayos me despierto
entre rayos me acuesto

***

escribo algo
algo todavía
algo más aún
añado palabras pájaros
hojas secas viento
borro palabras nuevamente
borro pájaros hojas secas viento
escribo algo todavía
vuelvo a añadir palabras
palabras otra vez
palabras aún
además pájaros hojas secas viento
borro palabras nuevamente
borro pájaros hojas secas viento
borro todo por fin

Lo que quiero decir
Es que no tengo nada que decir
Que todo lo que digo
Lo digo solamente
Solamente lo digo
Sin decir nada
Que mis palabras son fragmentos
Balbuceos de una frase oscura
Migajas de una vieja historia
Repleta de personajes
De señores y señoras que pasean
Bajo grandes cielos mudos
Sin saber que su sonrisa
Sus vestidos y sus huesos
Paseaban tranquilamente
Hace millares de años
Y seguirán paseando todavía
Millares de años más. Fragmentos
De una catástrofe celeste
De un insondable estornudo
Tan parecido al amor
Y hasta a la misma muerte
Que no distingue la arcilla
De la nada y nos sorprende cada día
Amarrados a una cama o una silla
Bajo la misma luz amarilla
El mismo miserable torbellino

Alguien dice
Que en la noche del cohete
Y la computadora
Los verdaderos poetas
Ya no escriben
Sino piensan solamente
Avanzan sin tropiezo
Entre la nada y la materia
Atraviesan cifras y galaxias
Que quizás no existen
Yo mientras tanto
Escribo solamente
Solamente escribo
Otros dicen
Que los verdaderos poetas
Se ocupan del amor
De la primavera y de la muerte
Yo solamente escribo
Escribo solamente
Todo es palabra para mí
Palabras centelleantes son los días
Palabras mi corazón y mis costillas
Y los diez mil objetos
Que me rodean como lobos
Palabras solamente
Y las diez mil parejas
Que copulan en la tierra
Como si fueran pájaros o peces
Palabras solamente
Porque la poesía
Que ahora mueve mi mano
Mueve también millares
Y millares de luceros
Como si fueran cerillas
No dice nada la poesía
Que ya no canta ni sonríe
Ni solloza entre las flores
Sino calla simplemente
En el tintero
¿Qué puedo yo agregar
A tanto silencio
Sino silencio
Más silencio
Sólo silencio?

Que somos todos poetas
No cabe duda alguna
Y no sólo los humanos
Sino también el cocodrilo
Las hormigas y los monos
Son poetas. El mismo sol
Que parece el más grande de todos
Es un poeta menor
Que nos alumbra débilmente
Y no nos deja ver
Más allá de nuestros ojos
Pero hay también personas
Que jamás han escrito
Una sola palabra
Porque ellos mismos son
Confusas palabras balbuceos
De ese brillante adefesio
Que llamamos universo
Insolentes criaturas
Que atraviesan nuestro mundo
Con un zapato en la cabeza
Y un sombrero en los pies
Siempre en busca de algo puro
De incandescentes bicicletas
Que según afirman
Llevan a las estrellas
Puesto que para ellos
Dios pasea diariamente
A través de sus galaxias
Y sus átomos azules
Siempre en bicicleta
Sin darse cuenta ¡oh inocentes!
Que nada de eso existe
Que no hay ninguna bicicleta
Y que lo que ellos buscan
Sin escribir nunca nada
Ni llamarse poetas
Se llama simplemente
Poesía

Todo el mundo huye de mi corazón
Porque parece un cocodrilo. Todo el mundo dice
Que no soy un hombre sino un árbol derribado. Nadie sabe
Que entre mis ojos de niño y mi pecho cansado
Hay solamente musgo, llanto, flores indecibles,
Versos que parecen de oro puro
Y no son sino fragmentos de una estrella de papel.
No es culpa mía si estoy hecho de cristales amargos,
De irremediable ceniza y líquidos ardientes
Que se disputan mi ternura y sin cesar empujan
Dolorosas poleas, émbolos y ruedas escarlata.
Soy solamente un puñado de tierra que tropieza,
Un insolente juguete de cabellos negros
Y dientes amarillos. No es culpa mía
Si no parezco de carne y hueso, si bajo mi sombrero
Y mi pantalón gastado palpita un cielo puro,
Si todo el mundo dice que no amo a la gente
Porque me pongo una corbata y observo el firmamento,
O porque estoy hecho de sustancias aciagas,
De sonrientes materias que sollozan y sollozan
Y sollozantes materias que sonríen y sonríen.
Soy solamente un animal que escribe y se enamora,
Un laberinto de células y ácidos azules,
Una torre de palabras que nunca llega al cielo
Porque no toca ni se apoya en los luceros,
Sino en mi pobre corazón siempre en tinieblas,
Siempre en el fondo de un tintero,
Como si fuera un cocodrilo

Completamente solo entre papeles
Repletos de palabras
Entre alimentos que se vuelven sueños
Uñas excrementos
Y alimentos que se vuelven llanto
Huesos pensamiento
Entre cortinas que se abren
Como amaneceres y cortinas que se cierran
Como cicatrices. Solo entre sombras
Semejantes a otras sombras
Sombras de objetos que no son objetos
Sino torbellinos
De materias que sollozan y que tosen
Y que nunca fallecen
Siempre entre sombras entre sombras solamente
Acariciando una pared cualquiera
Un puñado de tierra en el bolsillo
Células muertas que antes fueran padres y madres
Tíos hermanos amigos
Ahora convertidos en palabras
Completamente solo entre fragmentos
De personas que no son personas
Sino racimos de botones e intestinos
Persiguiendo el mundo entero
En el fondo de un tintero
Hasta llegar al fin de la escritura
En donde muere la palabra
Y se levanta soberana la sonrisa
De la nada la misteriosa pelota de papel
Que ahora aprieto nuevamente
En una mano

Completamente sózinho entre papeis
repletos de palavras
Entre alimentos que se tornam sonhos
Unhas excrementos
E restos de comida que se tornam pranto
Ossos pensamento
Entre cortinas que se abrem
Como amanheceres e cortinas que se fecham
Como cicatrizes. Sózinho entre sombras
Semelhantes a outras sombras
Sombras de objectos que não são objectos
Mas turbilhões
De materia que soluça e que tosse
E que nunca morre
Sempre entre sombras entre sombras somente
Acariciando uma parede qualquer
Um punhado de terra no bolso
Células mortas que antes foram pais e mães
Tios irmãos amigos
Agora tranformados em palavras
Completamente sózinho entre fragmentos
De pessoas que não são pessoas
Mas aglomerados de recados e entranhas
Perseguindo o mundo inteiro
No fundo de um tinteiro
Até chegar ao fim da escrita
No lugar onde a palavra morre
E se levanta soberano o sorriso
Do nada a misteriosa bola de papel
Que agora aperto novamente
Com uma mão.

 

tradução: at

Escribo con los ojos
Con el corazón con la mano
Pido consejo a mis orejas
Y a mis labios
Cada verso que escribo
Es de carne y hueso.

Sólo mi pensamiento
Es de papel.

anochece amanece
anochece amanece anochece
y hay tristeza
hay tristeza
hay tristeza
comercio de pájaros
máquinas en marcha
más tristeza
máquinas en marcha
pájaros esplendores siglos
mil doscientos diez
cuarenta veinticinco
personas conduciendo
una cabeza amarga
dos brazos y dos piernas
fatigadas
veinte dedos y un estómago
espaldas y caderas
fatigadas
más tristeza pájaros comercio
velocidad bebidas cine
más cabezas brazos y caderas
millones de orejas estómagos dedos
de sombras de nubes de frutos
de soles insectos
de horas de días de nada
más amor y tristeza
y odios y dudas sonrisas
infamias silencios
más aún más aún más aún
hay tristeza
hay tristeza
hay tristeza
hay minutos
pájaros
esplendores
siglos
o no hay tristeza
no hay estrellas
ni soles ni frutos
ni sonrisas ni odio
no hay infamias
no hay silencios
ni horas ni días ni nada
ni relojes ni tiempo
velocidad ni esplendores
y sin embargo amanece
anochece amanece
anochece amanece
anochece... etc.

héme sin cabeza y sin calzado
esperando tu llegada
con una mano azul y otra amarilla
para ocultar mi tristeza
mientras la lluvia empieza
y un saxofón de plata suena y suena
en la Vía Appia
un par de anteojos oscuros
y besarte siempre en los ojos
mientras se mueve el sol
de un día a otro
y tus vestidos vuelan incendiados
por la Vía Appia
con mi corazón latiendo siempre
siempre siempre siempre siempre
un par de anteojos oscuros
y tal vez un saxofón
por la Vía Appia

Nada es más claro para mí
Que el misterio de la muerte
Ni nada más oscuro
Que la luz misma del sol
La sombra brota de mi pluma
Y alcanza el cielo entero
Dama de traje infinito
Baila a solas con la luz
Siempre detrás de las cosas
Siempre a la espalda de todo
Con su gran cola vacía
Y su llamarada
Semejante a este poema
Que apenas logro escribir
Y ya no es nada.


lido aqui

Desayunarse
Mirarse en el espejo
Abrir y cerrar puertas
Fumar un cigarrillo
Escribir un poema
No mirar hacia adelante
No mirar hacia atrás
No mirar hacia arriba
No pensar en nada
Seguir fumando cigarrillos
Seguir abriendo puertas
Seguir cerrando puertas
Considerar que el tiempo pasa
Pasar el tiempo considerando
Que el tiempo pasa
Seguir llenando papeles
Escribir versos audaces
Metáforas sorprendentes
Brillantes adjetivos
Escribir por ejemplo
Un automóvil de Astrakhán
Transportará todas las noches
La estatua de Mao Tsé Tung
De la oficina a la alcoba
No escribir sobre la luna
Ni sobre la alcoba
No jugar con el amor
Ni con la rosa
Ni con el dolor
Ni con la prosa
Dibujar un corazón escarlata
Sobre la página blanca
Y pisotearlo con fuerza
O fabricar con gran esmero
Un corazón de madera
Y quemarlo lentamente
En una hoguera
Dejar pasar la gente
Dejar pasar el tiempo
Dejar pasar el mismo
Automóvil de Astrakhán
Con la estatua de Mao Tsé Tung
En la maletera
No mirar hacia adelante
No mirar hacia atrás
No mirar hacia arriba
No pensar en nada
Seguir abriendo puertas
Seguir cerrando puertas
Seguir fumando cigarrillos
Y escribiendo versos
Cada vez más sencillos
Cada vez más ligeros
Como burbujas
O como anillos
De humo celeste
Y pasajero
O como pompas
De jabón amarillo
Sin olvidar la medida
Ni descuidar el sentido
Ni la mermelada
Ni la nada
Ni la metonimia
Ni el oximorón
Ni la rima en on
Tan conmovedora
Y tan segura
Como el corazón
Como el saxofón
Como la basura
Pero eliminando
Sin piedad ninguna
La indisponente
Rima en ina
Demasiado pura
Demasiado fina
En un poema sin amor
Y sin altura
Con olor a pene
Y a vagina
Dejar caer la mirada
Sobre el papel indiferente
Arrastrar toda la vida
Un zapato incandescente
Un pantalón arrugado
Un bigote indecente
Y de la rima en ente
Pasar rápidamente
Sin molestar a la gente
A la rima en atas
Sólo para corregir
Un par de erratas
¿Vivir como las ratas
Y ponerse corbatas
O morir como las ratas
Sin ponerse corbatas?
Arrojar al canasto
Tanto verso incierto
Y con mucho cuidado
Como quien saca una carta
Del propio costado
Escribir muy claramente
Sobre el papel cansado
La palabra muerte
Tomar una cucharada
De leche de magnesia
Bien azucarada
(Excelente para el cutis
La sonrisa y los huesos)
Seguir abriendo puertas
Seguir cerrando puertas
Seguir fumando cigarrillos
No mirar hacia adelante
No mirar hacia atrás
No mirar hacia arriba
No pensar en nada

De leche y aunque la leche
De niño no es la misma
Que de viejo la botella de leche
Es la misma. No hay botella
Que no sea de leche ni leche
Que no sea en botella. O no hay botella
Pero tampoco hay leche
O solamente hay botella y la leche
No es de niño ni de viejo
Sino de una muchacha cuyo seno
Es una botella de leche
Que se toma sólo de noche
Y en el lecho